Mobiliario y verano: Dos elementos que van de la mano en el retail
Verano es alegría, desenfado y ligereza, no sólo de ropa sino de ánimo, especialmente entre los compradores. El retail ha probado que su camaleónico carácter y su adaptabilidad a las temporadas, han sido dos de sus múltiples virtudes. Precisamente, esta versatilidad para cambiar completamente de acuerdo al deseo y necesidades de sus compradores, lo ha hecho un auténtico triunfador por décadas.
Con la llegada de las estaciones, las tiendas cambian su espíritu para darle a sus visitantes un entorno agradable y que los haga sentir bienvenidos. Es por ello que en el invierno las tiendas se sienten más cálidas y acogedoras. Asimismo, en el verano, ir de compras es una experiencia que invita a la la algarabía y el relax.
Pero, cambiar la decoración del retail va mucho más allá de bajarle al termostato o colocar un par de elementos tropicales. Implica un estudio de materiales, colores y formas.
Veamos cómo el mobiliario y la decoración del retail se adapta al verano de una manera versátil y eficiente, que atrae a más visitantes. Analizaremos algunos de los elementos más importantes para adaptar tu tienda al verano.
La luz. La protagonista del verano
Si pudiéramos definir al verano en una sola palabra, esa sería: LUZ. El verano es una explosión sensorial en la que la luz se transforma en el protagonista principal. La iluminación correcta puede transformar cualquier espacio en una zona llena de alegría y buenas vibraciones. Dos elementos imprescindibles en el retail.
Pero, la luz no sólo se define como un elemento de iluminación, la luz en la decoración se obtiene de los colores del entorno y de los elementos decorativos. El uso de tonos claros y que reflejen en mayor medida la luz permite resaltar al resto de los elementos.
Adicionalmente, usar materiales decorativos para el mobiliario en maderas claras, acero inoxidable y materiales reflectivos ayuda a potenciar la luz. La elección de las fuentes de luz debe estar orientada hacia las luces blancas y frías. Esta explosión visual le da a los espacios, especialmente a los más cerrados, una mayor sensación de amplitud.
Sin embargo, debemos tener siempre en consideración que la iluminación y nuestro propósito como tienda van de la mano. Estudios de comportamiento del consumidor reflejan que la iluminación incide directamente en su intención de compra y agrado en el local. Las luces cálidas y amarillas son sinónimo de refugio y paz, mientras que las blancas y brillantes, reflejan alegría y energía.
El color del verano, infinitos colores para un mismo objetivo
El consumidor se ve afectado por la carga sensorial como un elemento que puede afectar su intención de compra. Y aquí debemos ser muy cuidadosos en cuanto al cambio decorativo para el verano. Es una tendencia muy común, sobrecargar de colores primarios, brillantes y estridentes nuestras paredes y mobiliario durante el verano.
No obstante, encontrar el equilibrio es una clave fundamental para no restar importancia a los productos que ofrecemos. Asimismo, no debemos generar una saturación cromática en los sentidos del comprador pues esto puede llegar a ser contraproducente.
La paleta de colores es tan amplia que podríamos pasar horas y días enteros tratando de elegir el color ideal. Lo más recomendable es elegir tonos claros, frescos y agradables que se asemejen lo máximo posible a nuestro brand book o libro de marca.
A veces un simple fondo blanco o un tenue pastel hacen maravillas cuando se combina con las formas y los colores del mobiliario. Los estilos y materiales del mobiliario pueden ser obras de arte sobre lienzos puros, uniformes y sin causar disrupción.
El mobiliario: Un juego de formas, colores y sensaciones
La última pieza del puzzle decorativo del verano es el mobiliario. Este elemento es clave dentro de nuestro cambio de look veraniego por su efecto en todo el entorno. Las formas y los materiales del mobiliario son el marco perfecto para que tus productos estén siempre en primer plano.
En la elección del mobiliario de verano, debemos ser tan cuidadosos como en la elección de la iluminación y los colores. Es crítico encontrar el equilibrio entre el objetivo de darle al retail una nueva cara y sobrecargar a los compradores.
Las tendencias actuales en torno al mobiliario es considerarlo mucho más que un elemento estático que sólo exhibe o decora. En el retail moderno, el mobiliario forma parte integral de la experiencia de compra.
La sincronía entre materiales, formas, texturas y colores se combina con usos únicos que permiten destacar al producto de forma única. Los diseños de mobiliarios funcionales e integrables al espacio como un elemento interactivo es ideal.
Aún así, no debemos olvidar que el verano es una época diferente en términos de la experiencia de compra en sí misma. Muchas tiendas elevan su volúmen de visitas en los largos días del verano con un consecuente aumento del uso del mobiliario.
La resistencia de los materiales juega a favor de este aumento del uso con elementos constructivos robustos, resistentes y más duraderos. No olvidemos incluir dentro de nuestro estudio decorativo, elementos que permitan el descanso de los compradores.
Se ha demostrado que las tiendas que ofrecen espacios para sentarse y/o relajarse aumentan la permanencia y la conexión con el consumidor. Esto es fundamental en una temporada en la que las largas caminatas y el calor sofocante merma las energías del usuario.
Mobiliario, luz y color: tres ingredientes clave para este verano
Durante la temporada estival, las tiendas reciben mayores visitas, hacer de nuestro retail un espacio que invite a quedarse, interactuar con el producto y en definitiva, comprar más, es un objetivo clave.
La decoración y la elección del mobiliario juega un papel protagonista en este sentido. Elegir una perfecta combinación de luces, colores y mobiliario puede ser determinante en esta temporada.
Redactora y Creativa.
Licenciada en publicidad y relaciones públicas.
Máster en branded content por la Madrid Content School.